Ana Pastor, tan divina ella, apareció un velo en la cabeza haciéndole una entrevista al dictador iraní Mahmud Ahmadineyad.¡Qué valiente ella! Y como buena progre – de la SER a la TVE de Zapatero – se pone un velo para que se vea que no pasa nada. Si queda muy mono, así colocadito y tal… Si total, sólo es una pañoleta sin más…
Una pañoleta sin más que es el símbolo de la mayor represión de derechos en masa en el mundo actual. Símbolo de sometimiento a una oligarquía donde el poder político y religioso no conocen separación, y donde la religión lo inunda todo con posicionamientos radicales, fanáticos, que llevan en no pocos casos a la violencia terrorista.
Pero eso sí, ella se lo pone hasta la mitad de la cabeza, y ups, ¡qué descuido el mío! se me ha resbalado… ¿Cómo no se te va a resbalar, hija? Si es que eso no era más que un souvenir, una nota folcrórica para salir ante la cámara. Un hiyab TIENE QUE CUBRIR TODA LA CABEZA y TODO EL PELO. Sólo debe dejar ver la cara. No sólo eso. Es que estamos hablando del presidentede Irán, un país donde el CHADOR es obligatorio en ciertos ámbitos como, por ejemplo, los edificios públicos…
Pero el tema no es el velo. Siempre lo he dicho: Hay que pasar del tema del velo sí, velo no. Lo importante no es si una mujer lleva velo o no lo lleva, lo importante es LA FALTA DE LIBERTAD. La falta de libertad y el mirar para otro lado del progrerío español cuando se trata de someter a las mujeres a manos del fanatismo religioso musulmán. Y no estoy hablando de ser cristianos o judíos o musulmanes. No estoy hablando de que esta religión sea mejor o peor que aquella. Estoy hablando de creer en la dignidad del individuo y en nuestro sistema de libertades (que cuesta, claro, con todas las tropelías que se suceden a diario) pero que con todos sus defectos es el mejor del mundo.
Lo importante no es el velo. Lo importante es que desde las instituciones (véase una universidad) se da cobijo al vandalismo y a la intolerancia. Se da cobijo a la burla y al desprecio sectarios, se da cobijo al extremismo, a la ignorancia, a la alienación ideológica, al desprecio al civismo y la ciudadanía. Se da cobijo a todo ello y se mira para otro lado (como en el caso del velo y el chador) cuando el salvajismo y la falta de acervo democrático aflora. Así es como se llega a que el profesor, persona que debería instruir a sus alumnos en el básico y elemental principio de respeto al prójimo, en la permanente actitud autocrítica con las propias convicciones, en el inigualable valor de las libertades de culto, de ideología y de expresión, en el poder de la razón sobre la visceralidad, en las técnicas para construir un argumento intelectualmente sólido con el que convencer en un debate y poder mejorar el mundo, usa su clase como púlpito ideológico (según parece incluso para hacer apología del terrorismo) para así alienar, aborregar y atrofiar el criterio de sus alumnos, en vez de usarla para lo que fue concevida: como sala de aprendizaje. Eso es lo importante.
De ser auténticas las fotos que Mulpiot ha colgado en ForoPolítica sobre el campus de Somosaguas, creo que no hace falta decir más. Una imagen vale más que mil palabras. Y en el hilo hay no pocas imágenes y todas bien expresivas.
Y esto SI es lo importante. La falta de libertad, de valores democráticos, de cultura y de futuro.